Permite la intubación endotraqueal y la reanimación, sin movilizar al recién nacido.
Esto hace que el circuito neumático de ventilación pulmonar, venocrisis, sondas gástricas, sondas de drenajes, sensores de oxígeno, etc. se desconecten, poniendo en riesgo la salud del neonato.
En NICU, la cúpula neonatal es la que se moviliza, minimizando el riesgo.